— Mi hermano me lo ha dicho. Él es el dios del oráculo, de la adivinación —te dice Artemisa—. Es Hefesto. Él es el vil asesino que planea matar a Zeus.
No duda en ningún momento al decirlo.
— Hemos extendido el rumor de que la culpable es Hera, para que Hefesto no sepa que estamos detrás de él.
Tu piensas, aunque prefieres no decirle nada, que ya es demasiado tarde para ello. Hefesto, aun estando borracho, se ha fijado que Artemisa no le quitado ojo en toda la noche.
— ¿y qué pensáis hacer ahora? —le preguntas.
— El plan comenzará en cuanto tú lo digas —te explica—. Llama a Zeus y llévatelo al centro de la sala, di que ya tienes al culpable y que lo tienes todo listo para atraparle. En cuanto estés allí con él, el espectáculo podrá empezar.
Artemisa mira a un lado y otro para asegurarse que nadie te oye.
— Mi hermano Apolo se pondrá a vuestra espalda para proteger a Zeus y yo voy a coger el arco y me voy a la puerta a proteger la entrada. Afrodita y Ares se han ofrecido voluntarios para asesinar a Hefesto.
Todo está ya dispuesto. La cosa ya no tiene marcha atrás. El caso parece listo para sentencia. ¿Pero lo está? Sísifo parece mirarte con inquietud. Miras a Artemisa.
— Después mostraremos como prueba las armaduras que Hefesto ha estado construyendo para armar a los gigantes.
Debes decidirte. Es el momento. Apoyas a Artemisa o te desmarcas de esta teoría. Quizá podrías hablar con Sísifo, con el que todavía no lo has hecho.
No duda en ningún momento al decirlo.
— Hemos extendido el rumor de que la culpable es Hera, para que Hefesto no sepa que estamos detrás de él.
Tu piensas, aunque prefieres no decirle nada, que ya es demasiado tarde para ello. Hefesto, aun estando borracho, se ha fijado que Artemisa no le quitado ojo en toda la noche.
— ¿y qué pensáis hacer ahora? —le preguntas.
— El plan comenzará en cuanto tú lo digas —te explica—. Llama a Zeus y llévatelo al centro de la sala, di que ya tienes al culpable y que lo tienes todo listo para atraparle. En cuanto estés allí con él, el espectáculo podrá empezar.
Artemisa mira a un lado y otro para asegurarse que nadie te oye.
— Mi hermano Apolo se pondrá a vuestra espalda para proteger a Zeus y yo voy a coger el arco y me voy a la puerta a proteger la entrada. Afrodita y Ares se han ofrecido voluntarios para asesinar a Hefesto.
Todo está ya dispuesto. La cosa ya no tiene marcha atrás. El caso parece listo para sentencia. ¿Pero lo está? Sísifo parece mirarte con inquietud. Miras a Artemisa.
— Después mostraremos como prueba las armaduras que Hefesto ha estado construyendo para armar a los gigantes.
Debes decidirte. Es el momento. Apoyas a Artemisa o te desmarcas de esta teoría. Quizá podrías hablar con Sísifo, con el que todavía no lo has hecho.
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