Escribes la carta

Respondes afirmativamente la carta de Zeus

Te cuesta hacerlo toda la tarde. La papelera que antes sólo contenía la bola de papel con la carta de Zeus está ahora lleno con probaturas de cartas. ¿Cómo se le trata a un dios? ¿Le pongo estimado, magmánimo o majestad? ¿Le cuento mis motivos para aceptar el caso o no necesito andar justificándome? Finalmente, tras ocho horas, la carta quedó así:

Acepto el caso. Espero sus instrucciones.

La respuesta, sorprendentemente, llego tan solo 10 minutos después. Alguien ha tocado la puerta del despacho y, al abrirla, la has encontrado allí.