Confesiones de los culpables

Apolo quería convertirse en el rey del Olimpo

Templo de Apolo

No podemos seguir viviendo en este olvido. Los hombres deben enterarse de que seguimos existiendo, de que dependen de nosotros; y la única forma de hacerlo es mandarles pestes, desgracias, mostrarnos ante ellos…medidas a las que Zeus lleva negándose durante ya demasiado tiempo —ha confesado.

—Al saber que había contratado un inmortal quise desestabilizarlo. Pensé que ofreciéndole un destino tan desfavorable, no llegaría jamás a cruzar las puertas del Olimpo.

—No, Artemisa, como buena hermana sólo quería apoyarme, como lo hizo cuando mi madre tuvo que darnos a luz a escondidas —ha contestado a una pregunta sobre la relación de Artemisa con el caso.

También Ares ha sido interrogado sobre su implicación.

Ares y Afrodita

Lo hicimos por Amor. Nosotros no tenemos nada contra Zeus. Nuestro objetivo era otro. Afrodita, la belleza pura, se vio obligada a casarse con Hefesto, el deforme. Queríamos librarnos de él, era el único obstáculo para vivir nuestro amor sin restricciones. Acordamos con Apolo hacer creer al mortal que Hefesto era el culpable, así poder librarnos de él fácilmente. Y él aprovecharía la confusión para matar a Zeus.