Te acercas a él y le felicitas por su hazaña por haber matado al león de Nemea. Le dices también que necesita unos brazos fuertes como los suyos para salvar a Zeus esa noche. Él te mira extrañado, como se mira a un borracho.
Hay un gran revuelo en la sala, multitud de gritos y dioses corriendo. No consigues ver nada. Intentas abrirte paso.
Zeus está muerto en mitad de la sala
Has fallado en tu investigación. Él no era el que venció al león de Nemea.
Has perdido demasiado tiempo
Y ha sido tarde